Turismo justo y comunitario: ¿cómo eliminar los obstáculos a la igualdad de género?
29 Sep 2025

Turismo justo y comunitario: ¿cómo eliminar los obstáculos a la igualdad de género?.

El sector turístico es uno de los más dinámicos del mundo y representa una importante oportunidad económica, especialmente en los países en desarrollo. Pero detrás de las cifras de crecimiento y las promesas de desarrollo local, persiste una realidad: las desigualdades de género siguen siendo profundas. Las mujeres, aunque muy presentes en las actividades turísticas, siguen encontrando obstáculos estructurales que limitan su plena participación.

El turismo comunitario y el turismo equitativo se presentan como alternativas capaces de transformar esta realidad. Al situar la justicia social, la cooperación y el equilibrio de las relaciones de poder en el centro de los intercambios, el turismo puede convertirse en una palanca para el empoderamiento. Pero para ello es necesario reconocer los obstáculos que persisten y poner en marcha estrategias concretas.

Con esta perspectiva, el grupo de trabajo Turismo Comunitario y Justo de ISTO ha invitado a dos profesionales a compartir sus experiencias y reflexiones:

Sus puntos de vista cruzados arrojan luz tanto sobre los obstáculos persistentes como sobre las vías de acción para un turismo verdaderamente equitativo e inclusivo.

Los principales obstáculos a los que se enfrentan las mujeres en el turismo

Acceso limitado a los recursos financieros

El primer obstáculo, y no por ello menos importante, es el dinero. En muchos países, las mujeres tienen un acceso restringido al crédito, a la financiación pública y a los mercados. Sin capital inicial, es imposible abrir un alojamiento turístico, crear una agencia receptiva o incluso equipar un taller de artesanía. Esta dependencia financiera limita en gran medida su autonomía y su poder de decisión.

Aislamiento geográfico y digital

En las zonas rurales y remotas, las mujeres sufren especialmente la falta de infraestructuras. La ausencia de electricidad, transporte y, sobre todo, acceso a Internet son obstáculos que impiden la comunicación con los clientes, la promoción de actividades o el acceso a la formación en línea. Esta brecha digital, más acusada entre las mujeres, acentúa su marginación.

El déficit de formación y competencias técnicas.

Muchas mujeres no tienen acceso a la formación técnica, especialmente en los oficios más valorados del turismo (guía, gestión, marketing digital). Se ven relegadas a tareas domésticas o a roles considerados «naturales» (cocina, artesanía, recepción). El resultado es una segregación profesional que las priva de oportunidades económicas y de un pleno reconocimiento social.

El peso de los estereotipos y las normas sociales

En muchas culturas, las mujeres rara vez son percibidas como profesionales del turismo por derecho propio. Las tareas domésticas, que siguen recayendo en gran medida sobre ellas, les impiden participar en la gobernanza local o en cooperativas.

La falta de datos fiables

Por último, persiste un obstáculo transversal: la ausencia de estadísticas precisas sobre la participación de las mujeres en el sector turístico. Sin datos desglosados por sexo, es difícil medir los progresos, identificar las necesidades reales y convencer a los responsables políticos de que actúen.

Soluciones en construcción

La evaluación de género aplicada al turismo

Iaia Pedemonte insiste en una herramienta esencial, pero aún demasiado poco utilizada: la evaluación de género. Al integrar indicadores precisos en los proyectos turísticos, permite analizar las desigualdades entre los géneros y visibilizar las diferencias. Esta visibilidad es un requisito previo para la aplicación de políticas correctivas.

La acción ciudadana y la movilización local

En muchos contextos, el cambio proviene directamente de las mujeres. Al iniciar proyectos turísticos o unirse a cooperativas, transforman las representaciones sociales y se convierten en agentes de cambio. Su acción local inspira y arrastra a otras mujeres, creando un efecto multiplicador.

Apoyo a las mujeres emprendedoras y a las redes femeninas

Facilitar el acceso al crédito, apoyar la creación de empresas turísticas dirigidas por mujeres, reforzar las redes femeninas (guías, artesanas, proveedoras digitales): todas estas son palancas para romper el aislamiento y favorecer la puesta en común de experiencias.

Valorización de los oficios y roles invisibles

Algunas iniciativas consisten en valorizar las actividades tradicionalmente femeninas, otorgándoles un valor económico. Así, preparar comidas para los viajeros en una casa de huéspedes se convierte en una actividad profesional reconocida, lo que modifica el estatus social de la mujer en su comunidad.

Iniciativas inspiradoras en todo el mundo.

Las guías de trekking en Nepal

Cada vez más jóvenes nepalíes se forman para convertirse en guías de montaña, una profesión que durante mucho tiempo ha estado reservada a los hombres. Más de 800 mujeres siguen actualmente un curso para obtener su licencia oficial. Su enfoque, atento a las necesidades de las viajeras y arraigado en la cultura local, transforma las representaciones y abre nuevas perspectivas económicas en los pueblos.

El modelo de Kerala, en la India

En Kerala, un innovador programa de turismo comunitario reúne a mujeres, la sociedad civil y las instituciones públicas. Las mujeres desempeñan diversas funciones: gestión de actividades culturales, venta de productos locales, acogida de visitantes. Un código de conducta sin precedentes protege sus derechos y les permite decir «no» a ciertas formas de turismo que consideran intrusivas.

Madhya Pradesh: turismo rural y equidad

En este estado indio, cada familia puede acoger a viajeros en su casa, con un número limitado de camas para preservar la equidad entre los hogares. Las mujeres también crean cooperativas de restauración. Algunas se convierten en guías turísticas a pesar de la oposición familiar, llegando incluso a divorciarse para defender su independencia.

El proyecto «Safe Streets»

En varias ciudades indias, el proyecto Safe Streets forma a mujeres jóvenes en artes marciales para garantizar la seguridad en los espacios turísticos. Estas «ángeles guardianes» tranquilizan tanto a las viajeras como a las habitantes, al tiempo que acceden a un empleo gratificante.

La perspectiva del turismo equitativo

El papel de la etiqueta «Turismo Equitativo»

En Francia, la ATES desempeña un papel clave al integrar progresivamente criterios de igualdad entre los géneros en su Etiqueta de Turismo Justo. Un estudio realizado en 2024 puso de manifiesto múltiples discriminaciones: sobrecarga doméstica, exclusión de los puestos de decisión, escasa autonomía en la gestión de los ingresos. Estos resultados llevaron a reforzar los criterios de la etiqueta.

Estrategias adaptadas a las realidades locales

Para Coralie Marti, el reto consiste en conciliar los valores universales (igualdad, justicia, derechos fundamentales) y las realidades locales. El objetivo no es imponer un modelo externo, sino construir con las comunidades, en una lógica de cooperación a largo plazo y de mediación intercultural.

Palancas concretas para actuar

Los operadores turísticos con la etiqueta desarrollan varios enfoques:

  • seleccionar a los socios en función de sus competencias y no de su género;
  • promocionar modelos femeninos para inspirar nuevas trayectorias;
  • apoyar a las asociaciones de mujeres y valorizar sus producciones;
  • fomentar la formación en profesiones no tradicionales, como guía o gestora.

En algunos casos, se aplican medidas de discriminación positiva para acelerar el acceso de las mujeres a puestos clave.

Lecciones aprendidas y próximos pasos

De estos intercambios se desprenden cuatro lecciones importantes:

  1. La sensibilización es indispensable: muchos actores del turismo equitativo tienen buenas intenciones, pero no perciben las desigualdades de género sin las herramientas adecuadas.
  2. La participación en las decisiones es esencial: sin un lugar en la gobernanza, las mujeres siguen marginadas a pesar de su implicación.
  3. La adaptación al contexto local es imprescindible: las soluciones sostenibles deben surgir de las propias comunidades.
  4. Los compromisos deben ser medibles: las cartas, los indicadores y las cláusulas contractuales permiten transformar los discursos en acciones concretas.

Conclusión: hacia un turismo solidario motor de la igualdad

En todo el mundo, las mujeres se organizan, innovan y redefinen su papel en el turismo.

El reto sigue siendo enorme: eliminar los obstáculos financieros, sociales y culturales que aún dificultan la igualdad. Pero los ejemplos citados demuestran que el turismo comunitario y equitativo puede convertirse en un potente motor de justicia social, siempre que se integre plenamente la dimensión de género en sus prácticas y normas.

Para más información:

Estudio de capitalización sobre las asociaciones en el turismo equitativo, ATES, 2024 https://ates-tourisme-equitable.org/etudes/

Guía práctica «Promover la igualdad entre mujeres y hombres en las organizaciones de comercio justo», Commerce Equitable France, 2020 https://www.coordinationsud.org/document-ressource/guide-pratique-faire-avancer-legalite-femmes-hommes-dans-les-organisations-de-commerce-equitable/

Igualdad de género: ¿qué papel desempeñan las organizaciones turísticas? Organización Internacional de Turismo Social (ISTO), 2021 https://www.isto.international/wp-content/uploads/2022/03/Equidad-de-genero-ES.pdf

Artículo escrito por Coralie Marti (ATES).